Una moneda de la época del rey Ægica demuestra que hubo actividad en el siglo VIII
JOSÉ Mª LEMA
En los últimos retoques a la edición en papel de «Zas polo Miúdo», a cargo del Ayuntamiento de Zas, Evaristo Domínguez y el abajo firmante recibieron la información de que el historiador y arqueólogo Ramón Barros Sibelo residió en Torres Romelle (Loroño) de 1872 a 1880 , como administrador. Unos años más tarde, en 1883, enviaría una carta a la Real Academia de la Historia (RAH) de Madrid, de la que era corresponsal, en la que recomendaba la adquisición de dos monedas, “una de ellas Egica acuñada en Gerona”. . , objetos encontrados en las antiguas minas de Limideiro, hoy abandonadas. La RAH adquirió estas monedas para su sede en Madrid, y Galicia se quedó sin ellas.
De esta moneda de la época del rey visigodo Égica, que reinó del 687 al 702, tenemos información de que es de principios del siglo II. VIII todavía estaban trabajando -o, al menos, excavando- en las antiguas minas romanas de Limideiro . Este mismo año de 1883, el investigador Pedro Rodríguez nos habla de ellos en cuatro artículos que publicó por entregas bajo el título común de Grandimirum en la revista Galicia Diplomática. Ya por aquella época existía en el lugar de las minas una pequeña y profunda laguna, que había dado origen al microtopónimo de Pozo de Limideiro, «en cuyas barreras se descubre perfectamente la acción de la mano del hombre (…) , los múltiples montones de tierra suelta que destacan (…) y la abundancia de piedras metálicas (…) son hechos que no dejan lugar a dudas. [de que] La codiciada lata fue allí explotada por los antiguos (…)».
Pero Pedro Rodríguez, además de dar por segura -al igual que su contemporáneo, el canónigo e historiador Antonio López Ferreiro- la identificación del palacio Grandimirum de la vía XX romana del Itinerario Antonino con el actual Brandomil, ofrece una descripción detallada de los testimonios. del pasado romano de esta parroquia, partiendo del camino: «Bajando dicho monte [un outeiro da banda esquerda do río Xallas] y a cierta distancia del puente aparecen trozos de camino ancho y sólido, hasta que a poca distancia del mismo se tiene la oportunidad de admirar el camino que conduce al puente para continuar hacia el lado opuesto oeste. Este camino se conserva en perfecto estado de cohesión, y aunque muy desgastado, ya que salió de las manos de sus antiguos constructores a juzgar por sus caracteres.
Esperamos que las excavaciones del camino iniciadas el año pasado por el arqueólogo Lino Gorgoso y otros en otros lugares de la parroquia sigan ayudando a sacar a la luz su pasado. La buena disposición de los vecinos, plasmada en el documental Brandomil, un pueblo al lado de las Xallas , dirigido por Manuel Rial e impulsado por la Fundación Brandomil, fue un buen comienzo.
A continuación, Rodríguez describe el puente «con forma de lomo de águila» y el fuerte de tres muros concéntricos, y comenta la abundancia de restos arqueológicos encontrados en los terrenos de cultivo de la parroquia. Además del altar del dios Coso, también se encuentra en Olveira una estela funeraria, editada por Barros Sibelo, de una mujer llamada Flavia. No sabemos su paradero y sería importante localizarla.
Artículo en La Voz de Galicia